El Futbol Club Barcelona es una institución con un número enorme de socios, muy querida por todos ellos y por muchos otros simpatizantes. Por esta razón, al ser una organización tan importante y tener una repercusión mediática tan grande requiere de una gestión muy profesional y, sobretodo, transparente. Esta transparencia, hasta la fecha, la actual junta directiva no la viene cumpliendo con mucho éxito.
Han salido a la luz demasiados casos relacionando a los dirigentes del FCB con negocios en el sector futbolístico, mentiras sobre los participantes de la grada de animación, votación amañanada sobre la sede del Mundial, caso Alianto, Qatar, y la lista no se acaba aquí.
Han salido a la luz demasiados casos relacionando a los dirigentes del FCB con negocios en el sector futbolístico, mentiras sobre los participantes de la grada de animación, votación amañanada sobre la sede del Mundial, caso Alianto, Qatar, y la lista no se acaba aquí.
Empezemos por lo más actual, el lanzamiento de una bengala en el último "Clásico", por parte de un radical azulgrana al cual a él y otros tantos radicales se les vendió por el módico precio de 10 euros las entradas por parte de la junta directiva. A raíz de este hecho, se ha desvelado que Sandro Rosell en la campaña pre-electoral firmó un acuerdo con 10 grupos, uno de ellos los Boixos Nois, para formar una grada de animación con estos grupos, es decir, una manera encubierta para que los Boixos pudieran volver al Camp Nou.
Esto aún se agrava más cuando vemos videos de los debates de las elecciones del 2010 y Sandro niega rotundamente haber firmado ningún tipo de acuerdo con ese grupo. En conclusión, mintió en su día para llegar a la presidencia del Barcelona.
Esto aún se agrava más cuando vemos videos de los debates de las elecciones del 2010 y Sandro niega rotundamente haber firmado ningún tipo de acuerdo con ese grupo. En conclusión, mintió en su día para llegar a la presidencia del Barcelona.
Hace un par de meses también se desveló en la revista France Football el posible amaño en la votación para elegir la sede del mundial 2022, que acabó siendo Qatar, un país con el que Sandro parece tener mucha simpatía, ya que anteriorimente ha hecho algunos negocios con el principe heredero quatarí. Y en este amaño se señala al máximo dirigente azulgrana, entre otros.
Otro tema es el "Caso Alianto", una empresa propiedad del presidente del Barcelona que está acusada de malversación de fondos públicos en Brasil.
Estas prácticas no son ejemplares y el máximo representante del Barcelona no debería dar esta imagen a la gente porque no se parece nada a los valores que este club defiende. Estaremos a la espera de un cambio en la gestión y conducta de algunos directivos de la junta, y que esten más por los temas deportivos y para ganar títulos.
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