La realidad de la Obsolescencia Programada

¿Eres consciente de cómo es la sociedad consumista en la que vivimos? ¿Conoces la obsolescencia programada? ¿Sabes cuales son sus graves consecuencias en el mundo?

La obsolescencia programada nació en los años 20, cuando los fabricantes empezaron a estudiar y a centrarse en acortar la vida de ciertos productos con el objetivo de aumentar las ventas.

Todo empezó en el año 1924, varios gerentes de las mayores empresas  mundiales productoras de bombillas se reunieron clandestinamente con tal de formar un cártel. El objetivo de este cártel era controlar al cliente haciendo que este consumiera bombillas mas regularmente. Para ello, concluyeron que debían centrar su esfuerzo en la creación de una bombilla lo suficientemente delicada como para que su vida sea únicamente de 1.000 horas. 

Actualmente, muchas empresas conocidas emplean estas técnicas a sus productos con tal de mantener las ventas a un nivel alto. A parte, otras marcas manipulan mediante el marketing y la publicidad a los clientes haciendo que estos se sientan insatisfechos con sus compras y que decidan comprar otro bien o utensilio. Mediante este método no obligan directamente al consumidor a consumir, sino que lo hace por si mismo debido a su insatisfacción. Los consumidores asocian el consumismo con la felicidad, sin embargo actualmente consumimos 25 veces mas que en la época de Karl Marx pero no somos 25 veces mas felices.

La obsolescencia programada es un hecho existente del que no somos conscientes y que afecta negativamente tanto a la sociedad como al medio ambiente. Todos somos víctimas de la obsolescencia programada, ya que es el motor de la sociedad consumista en la que vivimos y la base del crecimiento.

¿Te has preguntado alguna vez donde van los objetos que desechamos? ¿Qué se hace con la mayoría de ordenadores estropeados/móviles que no queremos/impresoras que dejan de funcionar/…?

Todos estos deshechos que ya no queremos, son enviados al tercer mundo en forma de basura. Sin embargo, como es ilegal enviar basura a países tercermundistas, las empresas declaran esta basura como productos de segunda mano. Estas empresas, envían productos haciendo creer que es con el objetivo de tapar la brecha tecnológica que hay en el tercer mundo, pero es falso ya que la mayoría de estos, están estropeados y no funcionan.

El planeta no va a sostener mucho mas tiempo esta situación, ya que todos los recursos tanto energéticos como naturales son limitados y estamos acabando con ellos. El mundo es suficientemente grande para satisfacer las necesidades de todo el mundo, pero es demasiado pequeño para satisfacer la avaricia de unos pocos.




Fuentes:

Documental de "Comprar, tirar, comprar"